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La competencia semántica es definida como la dimensión léxica de un hablante. Dos aspectos hacen referencia a este término: primero la riqueza de vocabulario; es decir, la cantidad de palabras que una persona conoce y en segundo lugar, al uso que hace del mismo cuando se expresa de forma oral y escrita. El desarrollo del lenguaje en el niño es un proceso que está relacionado con el nivel de evolución del pensamiento.
Conforme el alumno adquiere y amplía el lenguaje va alcanzando niveles más complejos de categorización, inclusión, generalización, abstracción, reflexión, deducción, etx. Por ello las adquisiciones lingüísticas facilitan las operaciones intelectuales. Los alumnos presentan muchas dificultades al nivel de expresión y comprensión del lenguaje. El lenguaje pobre e incorrecto, el mal uso del vocabulario, la falta de fluidez, etc. son algunos de los problemas que conllevan finalmente un mal aprovechamiento de sus capacidades y rendimiento escolar.